TIPOS DE MATERIALES

Los materiales que afloran en la zona de estudio (LUCDEME hoja 722) pertenecen a los sistemas Cretácico, Terciario y Cuaternario (Instituto Geológico y Minero de España, 1974), pudiéndose dividir según su grado de consolidación y su composición en los siguientes grupos:

A) MATERIALES CONSOLIDADOS CARBONATADOS

Incluye a los siguientes:

– Calizas con nódulos de sílex y calcarenitas ligeramente pisolíticas. Forman parte de los afloramientos del Cretácico.

– Calizas lacustres que constituyen la facies superior del Neógeno de la zona de estudio. También existen niveles delgados de calizas micríticas frecuentemente recristalizadas y originando esparitas.

– Costras de los depósitos continentales, formadas por caliza zonada. Aparecen superpuestas a las calizas del Mioceno. Superior en los alrededores de Picassent, y, al Noroeste.

B) MATERIALES NO CONSOLIDADOS

Se pueden dividir en dos grupos en función de la edad: antiguos y recientes. Al primer grupo corresponden las margas blancas y grises del Cretácico que afloran principalmente junto con las calizas y calcarenitas. Dentro de este grupo se encuadra también la serie inferior detrítica del Mioceno constituida principalmente por areniscas limosas, limolitas y arcillas más o menos calcáreas; localmente pueden aparecer margas cretácicas, blancas, muy puras; su color, a excepción de estos niveles cretácicos, es ocre muy claro a rojizo. Se trata de sedimentos que oscilan entre areniscas limo-arcillosas y limolitas arenosas. Estas areniscas están por lo general poco consolidadas, casi sueltas, lo que contribuye a que aparezcan frecuentemente cubiertas por formaciones recientes que las enmascaran. Su estratificación es mala, ofreciendo un aspecto masivo, en el que se intercalan estos niveles bioclásticos que rompen su homogeneidad, pero que presentan escasa continuidad lateral.

Al segundo grupo pertenecen todos los materiales del período cuaternario, a los que pertenece el término de Sedaví con la única excepción de las costras de los depósitos continentales.

La mayoría de la zona está ocupada por materiales cuaternarios que recubren parcialmente el dominio Terciario. En conjunto, se presentan como una dilatada llanura prelitoral, ocupada en su mayor parte por L’Albufera y sedimentos asociados, y por los materiales de inundación del río Turia. Según IGME (1974), se distinguen tres tipos de depósitos bien diferenciables, con distintas variantes dentro de cada uno de ellos: depósitos continentales, depósitos marinos y depósitos mixtos.

Depósitos continentales

a) Depósitos de piedemonte: Aparecen en el vértice SO de la zona rodeando los relieves mesozoicos. Parecen corresponder a un glacis antiguo muy degradado constituido por arcillas rojas, con cantos de tamaño variable, parcialmente cementados en superficie por carbonatos que impiden su desaparición total.

b) Conos de deyección: El barranco de Picassent forma en su desembocadura un cono de deyección de típica forma triangular constituido por arcillas rojas, con cantos aluviales. Aparece encostrado superficialmente.

c) Mantos de arroyada antiguos: Forman una orla que rodea los relieves mesozóicos y cenozoicos, y en ocasiones se encuentra en las partes inferiores de los glacis de piedemonte. Litológicamente están formados por arcillas rojas, con niveles de cantos y nódulos calcáreos, Presentan encostramiento superficial.

La formación de costras superficiales en los tres tipos de depósitos citados es del tipo nódulos calcáreos y encostrados. Los primeros se forman por un lavado de los carbonatos de los horizontes superficiales del suelo y posterior deposición al volverse el mismo menos permeable; los, segundos se originan por una ascensión capilar de disoluciones cargadas de bicarbonato cálcico.

d) Mantos de arroyada modernos: Forman una orla discontinua que a veces se sitúa sobre los mantos de arroyada antiguos, con una extensión menor a la de éstos. La diferencia fundamental, consiste en que no presentan ningún tipo de encostramiento. El depósito está formado por arcillas rojas, con niveles de cantos subredondeados. Su génesis es semejante, aunque cronológicamente posterior, a la de aquellos.

e) Terrazas: Por término medio se pueden distinguir cuatro niveles sucesivos de terrazas correspondientes a cuatro épocas distintas de excavación y cuyas alturas medias son aproximadamente 20, 15, 10-8 y 2 m. La mayor parte de ellas son de depósito, aunque en puntos distintos una misma terraza puede ser de tipo erosivo o de depósito.

Depósitos marinos

Sólo se reconocen las playas actuales, constituidas en su mayor parte por arenas que forman una franja estrecha en la línea de costa y que, en algunos puntos, se ensanchan al Sur y sotavento de infraestructuras tales como puertos, espolones, golas, etc.

Depósitos mixtos

a) Limos de inundación: Forman un amplio cono que corresponde a la parte superficial del delta del Turia. Ocupan los alrededores de la ciudad de Valencia y han sido transformados casi en su totalidad en huerta. Están constituidos por limos arenosos grises y parduzcos sobre los que el Turia ha excavado posteriormente un nivel de terrazas. Bajan desde los alrededores de Manises en suave pendiente hasta la costa.

b) L’Albufera: Además de las causas naturales, que tienden a disminuir su extensión, ha sido muy afectada por la influencia antrópica. Está rodeada por una orla continua de limos pardos., que corresponderían a depósitos recientes de relleno.

c) Dunas: L’Albufera se encuentra exteriormente cerrada por cordones de dunas litorales longitudinales separadas por un surco interdunar, en el que a veces aflora el nivel freático «mallades» y en las que suele haber acumulaciones salinas. El cordón más antiguo, más próximo a L’Albufera, se presenta parcialmente fijado y en algunos puntos con una tenue rubificación, sin que esté encastrado en ningún punto. El resto de cordones dunares, más recientes, están formados por arenas sin fijar, pero en su mayor parte estabilizados por la pinada de la Devesa del Saler, excepto en las primeras líneas de costa.

Mapa geológico de Valencia.
Mapa geológico de Valencia. (Aplicación de la clasificación FAO a los suelos mediterráneos, 2005)